1.- REVES : Del hockey a la empresa
El revés era la mejor pegada de María Paula Castelli (33) cuando jugaba en la Selección argentina de hockey. Varios años después de despedirse de las canchas, Castelli diseña y vende remeras, buzos y camperas de hockey.
Acá y en Europa las prendas llevan pegadas las etiquetas con el nombre del emprendimiento: Revés, en homenaje a su golpe. "En los torneos internacionales siempre me llamaba la atención el merchandising. Había tazas, biromes, remeras", una costumbre que faltaba en el país.
"En 1998, cuando quedé afuera de la selección, decidí encarar este emprendimiento ligado al hockey". Revés nació con una inversión de cinco mil pesos, "el dinero que tenía ahorrado de las becas que me daban por jugar en la selección".
El negocio creció: desde hace tres años todas las categorías de la selección española de hockey se visten con Revés.
"Me instalé en España en enero de 2002, después del quinto presidente", cuenta desde Barcelona. Allí trabaja con su socia, la ex jugadora de la selección española, Sonia de Ignacio-Simó (35). Las dos se conocieron en la cancha, empuñando un palo de hockey y tratando de embocar la pelota en arcos opuestos.
Hoy "el setenta por ciento de nuestros productos se exporta desde la Argentina directo a Barcelona". Desde allí lo distribuyen a Alemania, Holanda, Bélgica, Francia, Inglaterra, Irlanda, Suiza, Austria e Italia.